Cada hora se compran 60 millones de botellas de plástico en todo el mundo y, al año, se usan 500.000 millones de bolsas, muchas de las cuales acaban en el medio ambiente. Ya nadie duda del gravísimo problema que suponen los plásticos de un solo uso, por eso es importante alcanzar acuerdos lo antes posible.
NATGEO
Vivimos en un mundo en constante movimiento, en constante cambio. Los medios nos enseñan que lo que hoy es moda, lo que hoy se usa, mañana puede que ya no sirva. En nuestros consumos diarios, nos sucede algo similar. Cada vez nos encontramos con más productos ultraprocesados en los comercios, comida rápida, comida industrializada. Una simple manzana es comercializada envuelta en nylon en los supermercados para acercarnos a la idea de “nuevo” y de acceso “rápido”. En nuestro país en agosto 2018 se aprobó la ley de “Uso Sustentable de Bolsas Plásticas”, esto implicó una regulación que hizo que a partir del 2019 los comercios tuvieran que cobrarle al usuario un costo adicional por cada bolsa empleada. Al día de hoy se calcula que se redujo en un 80% el uso de bolsas plásticas adquiridas en comercios. Esto implica un descenso importante en la cantidad de plástico proveniente de bolsas que se consume. Pero, ¿solo ese plástico es el que impacta?
Sólo por poner un ejemplo, cada latinoamericano produce un kilo de basura al día y la región en su conjunto, unas 541.000 toneladas diarias. Esto representa alrededor de un 10% de la basura mundial.
ONU
Como organización educativa debemos buscar apoyar los procesos internacionales y nacionales que se realizan en pos del cuidado del medio. Por lo que debemos encarar este problema con los jóvenes, problematizando las situaciones cotidianas y cuestionando cuáles de nuestras costumbres pueden ser transformadas para generar un menor impacto ambiental con nuestras acciones.
¿Querés aportar para mejorar esta situación?
Enterate cómo hacerlo en el siguiente documento: